Sentimiento, pasión, arte, tradición, espectáculo. Podríamos escribir cientos de palabras que intenten describir la magia del espectáculo flamenco y sería imposible conseguirlo. Porque la magia del flamenco no se escribe, se siente.
Y por eso sólo puede entenderse cuando se acude a un espectáculo flamenco en Sevilla, una de las ciudades que ha visto nacer este arte tan representativo de nuestra tierra. Con baile y cante en directo, todos nuestros sentidos se transportan a un mundo diferente, donde los pelos de punta son el segundo protagonista. Porque el primer protagonista es, por supuesto, el ritmo lleno de energía y fuerza.
La espontaneidad es el pilar fundamental de la expresión de un arte tan sevillano como el flamenco. Y una de las razones más importantes por las que un espectáculo flamenco es único, no ha
y dos iguales, ya que se juega con los sentimientos del momento acompañado de la música y el taconeo.